El auge de la industria del automóvil eléctrico en el siglo XXI ha aumentado significativamente la conciencia sobre la importancia de la transición a la propulsión eléctrica (EP) y a las energías renovables sostenibles para alimentar y reimpulsar las embarcaciones y, de este modo, ayudar a preservar las vías fluviales y el medio ambiente.

Al utilizar energía eléctrica para impulsar las palas de las hélices para la propulsión, la propulsión eléctrica sigue ganando impulso en todo el mundo, en todas las actividades de navegación, desde el turismo recreativo hasta la navegación privada.

Propulsión eléctrica: una evolución natural de la navegación a motor

Aunque suene extraño, la propulsión eléctrica en los barcos no es un invento de los tiempos modernos. Por el contrario, al igual que ocurrió con los automóviles, se originó en el siglo XIX. En 1839, el inventor alemán Moritz von Jacobi diseñó y lanzó en el río Neva el primer barco eléctrico de San Petersburgo (Rusia), un barco de 24 pies (7,3 m) con capacidad para hasta 14 pasajeros a una velocidad de crucero de 3 millas (4,8 km) por hora.

A lo largo de las décadas siguientes, los barcos sufrieron diferentes cambios en sus sistemas de propulsión que evolucionaron desde motores de vapor a nafta, eléctricos y de gasolina o diésel. En 1893, en la Feria Mundial de Chicago, los motores eléctricos se consideraron más seguros y maniobrables que otros motores.

Sin embargo, a pesar del interés inicial por los vehículos acuáticos eléctricos, pronto se olvidó la electrificación de los barcos. Debido a la falta de tecnología e innovación, los sistemas eléctricos no podían producir y almacenar energía para un funcionamiento adecuado ni ofrecer un buen rendimiento en el agua.

4 formas en que la propulsión eléctrica ayuda al medio ambiente

Con el «Pacto Verde Europeo», la Unión Europea se compromete a una propulsión libre de carbono para ayudar a los navegantes a transitar hacia una navegación ecológica. A partir de 2035, entrarán en vigor leyes restrictivas que prohíban la venta de vehículos nuevos que emitan carbono.

La propulsión eléctrica, especialmente la que funciona con energía solar a través de módulos fotovoltaicos solares, está destinada a revolucionar la economía de la navegación de recreo y la forma en que las personas utilizan sus barcos. La electrificación de las lanchas a motor se considera una solución convincente para abordar los urgentes problemas ambientales a los que nos enfrentamos hoy en día y proteger nuestro planeta. La propulsión eléctrica es respetuosa con el medio ambiente de 4 maneras diferentes:

1. Sin contaminación acústica

La contaminación acústica es un problema preocupante. Muchos puertos y ciudades están haciendo cumplir las leyes para evitar que la contaminación acústica se produzca y afecte significativamente a la salud pública. Entre sus muchas ventajas, los motores silenciosos permiten a los operadores de embarcaciones realizar sus actividades favoritas, navegando todo el día sin generar ruido por encima del agua.

2. Libre de emisiones

A medida que las embarcaciones eléctricas reducen drásticamente las emisiones generadas por las actividades en el agua, los navegantes pueden reducir su huella de carbono sin esfuerzo cuando operan sus barcos o los dejan en una marina o puerto.

3. Conservación de la vida marina

Los motores silenciosos también producen prácticamente ningún ruido ni frecuencias bajo el agua, lo que reduce el daño que las actividades de navegación causan a los animales acuáticos y al medio ambiente. Bajo el agua, el ruido es muy perturbador: como el ruido viaja rápido, acaba afectando a un gran número de animales, impidiéndoles localizar a sus presas y depredadores y alterando sus ciclos naturales, incluida la reproducción.

4. Capacidad para navegar por áreas restringidas

Solo es posible navegar por las áreas donde los motores de combustión están prohibidos o lo estarán pronto con barcos eléctricos o sin sistemas de motor incorporados. Algunos ejemplos son los lugares turísticos, como los canales de las ciudades de Ámsterdam y Venecia.

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Conclusión

Si bien los problemas ambientales y la legislación de este tipo probablemente disuadirán a algunos propietarios de embarcaciones de ser propietarios de embarcaciones en el futuro, la entrada de nuevos constructores de embarcaciones sostenibles en el mercado contrarrestará esta tendencia y ayudará a promover una vida sostenible en el agua. Con la industria de la navegación en la dirección correcta y con el lanzamiento de nuevos modelos de embarcaciones eléctricas cada año, la propulsión eléctrica irá en aumento y, por lo tanto, estará más al alcance de la mano.

En Volta, tenemos una misión clara. Impulsados por la navegación y el medio ambiente, nuestras grandes pasiones, hemos creado una empresa que ofrece a los navegantes de todo el mundo alternativas ecológicas a los motores diésel y de gasolina. Juntos podemos marcar la diferencia. Para obtener más información sobre nuestra amplia gama de barcos, visite nuestro catálogo.

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